El expresidente peruano atraviesa complicaciones en su salud, mientras crecen las incertidumbres sobre su participación en las elecciones de 2026.
El estado de salud de Alberto Fujimori, exmandatario de Perú, se ha deteriorado en los últimos días, según confirmaron fuentes cercanas al entorno del expresidente. Fujimori, quien actualmente reside en la casa de su hija Keiko Fujimori, fue captado en imágenes difundidas por medios locales mientras salía de una clínica en compañía de su hijo Kenji. Según declaraciones del propio expresidente, la visita médica fue para realizarse una tomografía y evaluar la evolución de su condición de salud, particularmente el cáncer de lengua que padece.
El delicado estado de Fujimori ha generado preocupación entre sus allegados, incluyendo al excongresista Miguel Torres, quien expresó que el exmandatario atraviesa «un momento difícil» pero que confía en su capacidad para superar este nuevo obstáculo. «Oremos por él», pidió Torres durante una entrevista con un medio de comunicación.
Esta situación ha despertado dudas sobre las intenciones políticas de Fujimori de postularse como candidato a la presidencia en las elecciones generales de 2026. Pese a su estado de salud y la avanzada edad de 86 años, el expresidente ha manifestado en ocasiones anteriores su deseo de volver a liderar el país. En julio de este año, su hija Keiko Fujimori sorprendió a la opinión pública al anunciar que su padre sería el candidato de Fuerza Popular para los comicios, decisión que ha sido duramente criticada por expertos debido a las restricciones legales que pesan sobre él.
Alberto Fujimori fue indultado en diciembre de 2023 por el Tribunal Constitucional, tras haber sido condenado por violaciones a los derechos humanos durante su gobierno en la década de 1990. Sin embargo, la ley peruana prohíbe que personas con sentencias no cumplidas por completo, como es el caso de Fujimori, puedan postularse a cargos públicos, lo que ha generado un debate jurídico sobre su posible candidatura.
En las últimas semanas, se han intensificado los rumores sobre el verdadero estado de salud de Fujimori. Fuentes no oficiales han señalado que estaría recuperándose de un tratamiento de quimioterapia, lo que ha elevado las preocupaciones sobre su capacidad para llevar adelante una campaña política. Sin embargo, en una breve declaración, el exmandatario dejó abierta la posibilidad de participar en las elecciones con un enigmático «vamos a ver», aumentando la incertidumbre sobre su futuro político.
A pesar de las limitaciones legales y de salud que enfrenta, Fujimori ha mantenido firme su postura de continuar en la vida política. Alejandro Aguinaga, médico personal y amigo cercano del expresidente, ha destacado su voluntad y fortaleza para seguir adelante. Según Aguinaga, Fujimori está «convencido de que puede volver a liderar Perú» y «trabajar para mejorar las condiciones de todos los peruanos». Estas afirmaciones han generado tanto apoyo como críticas dentro del espectro político del país.
La salud de Fujimori se ha deteriorado desde junio, cuando sufrió una caída que le provocó una fractura de cadera, requiriendo una intervención quirúrgica para colocarle una prótesis de titanio. Si bien su recuperación ha sido lenta, sus familiares y allegados aseguran que sigue luchando por mantenerse activo.
El panorama político para Fujimori sigue siendo incierto, tanto por las barreras legales como por su delicado estado de salud. Mientras tanto, sus seguidores se aferran a la esperanza de una eventual recuperación, aunque las probabilidades de que participe en las elecciones de 2026 siguen siendo inciertas. Todo dependerá de cómo evolucione su salud en los próximos meses.