Barcos Chinos Siguen Operando en el Mar Peruano Pese a Restricciones
A pesar de los esfuerzos del Gobierno peruano por regular y controlar la actividad pesquera en su territorio marítimo, los barcos chinos continúan operando en aguas peruanas, desafiando las restricciones impuestas. Esta situación ha generado una gran preocupación entre los pescadores locales y las autoridades, quienes buscan tomar acciones más contundentes para proteger los recursos marinos del país.
La Controversia en Torno al Decreto Supremo Nº 014-2024-PRODUCE
El Gobierno peruano emitió el Decreto Supremo Nº 014-2024-PRODUCE con el objetivo de regular la actividad pesquera de embarcaciones extranjeras dentro de las 200 millas náuticas que corresponden al territorio peruano. La normativa exige que las embarcaciones extranjeras, incluidas las chinas, estén equipadas con el sistema SISESAT, un sistema de monitoreo satelital que permite rastrear su ubicación y actividad en tiempo real.
Sin embargo, la aplicación de este decreto ha sido limitada. Según reportes de pescadores y autoridades, 21 barcos de bandera china ingresaron al puerto del Callao solo un día después de la entrada en vigencia del decreto. De estos, 10 barcos ya han zarpado hacia aguas internacionales sin que se haya podido verificar si cumplieron con los requisitos establecidos por la normativa. Entre los barcos identificados están el JU RONG YU 11, el MING XIANG 818 y el HONG DA 2, lo que plantea serias dudas sobre la efectividad del decreto.
Preocupación de los Pescadores Nacionales ante la Presencia de Barcos Chinos
Los pescadores peruanos han sido los primeros en alertar sobre la presencia constante de barcos chinos en el mar peruano. La Sociedad Nacional de Pesca Artesanal del Perú (Sonapescal) ha intervenido activamente, denunciando la entrada de estas embarcaciones a territorio nacional. Según sus informes, el 26 de septiembre de 2024, solo un día después de la implementación del decreto, varios barcos chinos ya habían sido detectados en el puerto del Callao. Esta situación ha generado una fuerte indignación entre los pescadores, quienes sienten que el Gobierno no está haciendo lo suficiente para proteger su principal fuente de sustento.
El impacto de la pesca ilegal por parte de estas embarcaciones extranjeras va más allá de los daños económicos. Los recursos marinos de Perú, uno de los países con mayor biodiversidad en sus aguas, están en riesgo debido a la sobreexplotación y las tácticas de pesca ilegal que utilizan los barcos chinos. Además, la pesca ilegal afecta la sostenibilidad a largo plazo de las especies marinas, lo que podría llevar a una disminución drástica de los recursos pesqueros.
Estrategias de Pesca Ilegal Empleadas por las Embarcaciones Chinas
El periodista Paolo Benza, del programa virtual La Contra, ha expuesto las tácticas ilegales que utilizan las embarcaciones chinas para evadir las leyes peruanas. Una de las estrategias más comunes es realizar «eventos de pesca» mientras transitan hacia los puertos peruanos. Por ejemplo, en diciembre de 2023, el barco Lu Qing Yuan Yu 161 redujo su velocidad a menos de dos nudos en dos ocasiones, lo que sugiere que estaba involucrado en actividad de pesca ilegal.
Otra táctica empleada es el «evento de deriva», una técnica en la que la embarcación se deja llevar por las corrientes marinas sin intervención humana. Esta maniobra permite que los barcos chinos realicen pesca furtiva sin levantar sospechas. En mayo de 2024, el barco Huaying 78 fue detectado utilizando esta técnica en aguas peruanas. Estas estrategias dificultan la labor de las autoridades peruanas para monitorear y controlar la actividad pesquera extranjera.
Acción del Congreso: Citación a las Autoridades Relevantes
Ante la gravedad de los hechos y la inacción percibida por parte de las autoridades, la Comisión de Defensa Nacional y la Comisión de Producción del Congreso han decidido tomar cartas en el asunto. El ministro de la Producción, Sergio González Guerrero, y el jefe de la Dirección General de Capitanías y Guardacostas (Dicapi) han sido citados a una sesión extraordinaria para explicar las razones detrás de la falta de control sobre los barcos chinos.
Esta reunión, que se llevará a cabo el 11 de octubre de 2024, es vista como una oportunidad para que las autoridades rindan cuentas y presenten un plan claro para detener la pesca ilegal en el mar peruano. Los legisladores y las autoridades deben actuar con rapidez para asegurar que las medidas actuales, como el Decreto Supremo Nº 014-2024-PRODUCE, sean aplicadas de manera efectiva y no se conviertan en simples formalidades sin impacto real.
El Llamado a Tomar Medidas Urgentes
La presión sobre el Gobierno peruano está aumentando a medida que más sectores exigen una respuesta contundente ante la presencia de barcos chinos en aguas peruanas. La pesca ilegal no solo afecta a los pescadores locales, sino que también tiene un impacto negativo en la economía y en la biodiversidad marina. Organizaciones de pesca artesanal, gremios empresariales y ciudadanos en general están pidiendo acciones más drásticas para proteger el territorio marítimo nacional.
Además, las tácticas ilegales empleadas por los barcos chinos han demostrado que la pesca no regulada sigue siendo una amenaza real para el Perú. La falta de control sobre estas embarcaciones plantea un desafío no solo para el Gobierno, sino también para la soberanía del país sobre sus recursos naturales. La comunidad internacional también está observando de cerca cómo Perú maneja esta situación, ya que la pesca ilegal es un problema global que afecta a muchas naciones costeras.
Conclusión: La Necesidad de Proteger el Mar Peruano
En conclusión, la operación de barcos chinos en el mar peruano ha generado una crisis que demanda acciones inmediatas por parte del Gobierno y el Congreso. La implementación efectiva del Decreto Supremo Nº 014-2024-PRODUCE es crucial para frenar la pesca ilegal y proteger los recursos marinos del país. Las autoridades están bajo la lupa, y la próxima sesión en el Congreso será determinante para evaluar qué medidas adicionales se tomarán para garantizar la seguridad y soberanía de las aguas peruanas.