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La congresista Alcarraz también despidió a una trabajadora vinculada al parlamentario denunciado por uso indebido de recursos públicos para fines políticos.

Kira Alcarraz se Desvincula de Darwin Espinoza y Renuncia a la Comisión de Ética

Kira Alcarraz se Desvincula de Darwin Espinoza y Renuncia a la Comisión de Ética

La legisladora Kira Alcarraz (Podemos Perú) anunció este lunes su renuncia a la Comisión de Ética del Congreso, tras las recientes acusaciones de intercambio de favores y la vinculación con Darwin Espinoza, parlamentario señalado por malversación de recursos públicos. Alcarraz también informó el despido de Estefanía Cuya Barzola, trabajadora conectada con Espinoza.

La renuncia se formalizó a través de un oficio enviado a la comisión, en el cual la congresista expresó su deseo de abandonar el grupo parlamentario encargado de evaluar faltas graves de otros congresistas. «Solicito mi retiro como miembro titular de la Comisión de Ética Parlamentaria del Congreso de la República, en representación del Grupo Parlamentario Acción Popular», se lee en el documento.

El escándalo surgió después de que el programa «Punto Final» revelara un supuesto intercambio de favores entre Alcarraz y Espinoza. El reportaje indicó que tres días después de que Espinoza permitiera a Alcarraz ocupar un espacio en su bancada, ella contrató a Cuya en la comisión que preside. Además, otra persona cercana a Alcarraz, Myrna Mosso, fue incorporada al equipo asesor de Acción Popular.

Un excolaborador de Espinoza afirmó que estos acuerdos son comunes en el Congreso: «A cambio de la contratación de la pareja del congresista en la comisión de Kira Alcarraz, ella también le pidió contratar a una asesora que antes tuvo en su despacho, y Darwin la hizo meter en el gabinete de asesores de Acción Popular».

El vínculo entre Alcarraz, Espinoza y Cuya se hizo más evidente cuando se publicaron imágenes que mostraban a los tres juntos en un aeropuerto a su retorno de Tumbes. Tras esta revelación, la exesposa de Espinoza, Bélgica Arangoitia, anunció el fin de su relación con el congresista.

En respuesta al escándalo, Alcarraz aclaró que no estaba al tanto de las conexiones personales entre sus trabajadores y que tomó medidas inmediatas para evitar mayores problemas. «No voy a estar preguntando a quién te levantas y a quién no te levantas», afirmó en una entrevista con TV Perú.

Por su parte, Espinoza enfrenta serias acusaciones de mal uso de recursos del Congreso. Se informó que su despacho solicitó 10,000 hojas bond para imprimir fichas de afiliación para su movimiento regional Adelante Áncash. Además, una de sus asistentes utilizó el acceso al sistema del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) para validar datos de personas que apoyaron la iniciativa.

Ante esta serie de denuncias y revelaciones, el Congreso enfrenta crecientes cuestionamientos sobre la ética y transparencia en la selección y contratación de su personal, así como en el uso de recursos públicos para fines políticos.

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